lunes, 22 de febrero de 2016

Avance de Isis en Libia y bombardeos, demuestran que la guerra no había terminado y se ha extendido, exactamente como fue Anticipado

EN LIBIA NO FLORECIÓ “LA PRIMAVERA ÁRABE”
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Nilson Agustín Caraballo Rosario
“Príncipe del Amor”
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Lunes 22 de febrero del 2016
(Según la hora universal)
*
Países africanos azotados o devastados por la Primavera Árabe,
hoy territorios donde se extiende el auto denominado Estado
Islámico, considerado como organización terrorista Número 1 
Este mundo globalizado, también es el mundo de la censura de prensa globalizada.

El bombardeo norteamericano en Libia el pasado viernes 19 de febrero, mató unas 50 personas, entre las que se encontraban dos diplomáticos serbios, confirmaron las autoridades de Serbia. Al respecto ha circulado la versión de que los ataques fueron dirigidos contra militantes del Estado Islámico, considerado como un país terrorista, que se ha convertido en enemigo número 1 de Estados Unidos y Rusia.

El ataque a gran escala de la aviación norteamericana demuestra en forma contundente que la guerra en Libia no terminó, como fue anunciado en forma unánime por los medios de comunicación internacionales.

Intensivos bombardeos contra los yihadistas, en Oriente Medio, África y Afganistán, son efectuados por las mayores potencias militares del globo desde hace año y medio… Desde octubre del 2014.

La guerra en Libia se inició en el contexto de una serie de conflictos, denominados “Primavera Árabe”, por el coro unísono de los medios internacionales globalizados. La Primavera que nunca floreció, se había iniciado en el año 2010.

El fin de la guerra en Libia fue declarado por Rusia y la Alianza Occidental, en octubre del 2011, después de intensos bombardeos sobre las principales ciudades del país africano.

Pero la verdad, después de esa fecha se intensificaron los combates entre las tropas socialistas, al parecer fundidas con las milicias islámicas, y el nuevo gobierno instalado en Bengasi por la "comunidad internacional".

En el 2013, organizaciones de los derechos humanos contabilizaban más de 50.000 muertos por la guerra, aunque otros estimaron las bajas en más de 100.000, pero lo cierto es que la cifra siguió aumentando en el 2014.

Y en el 2015, el nuevo gobierno pro occidental ya había sido desalojado del poder, su ejército perdió Trípoli, Sabha y Bengasi… Sirte y todas las grandes ciudades, aeropuertos y puertos del país, aunque algunos de sus representantes se refugiaron en una aldea, en la frontera con Egipto.

Las tropas triunfadoras instauraron un nuevo gobierno, no reconocido por la alianza ruso-norteamericana. En consecuencia, las Naciones Unidas insistieron en que fuera  instaurado un gobierno de unidad entre el régimen derrotado y las nuevas autoridades, como requisito indispensable para reconocer a Libia, en condición de Estado soberano. 

TODO ESTO HABÍA SIDO PRONOSTICADO

Entre otras noticias destacadas del 2014, 2015 y 2016, se encuentra el hundimiento de buques que intentaron cargar petróleo en las costas de Libia.

Desde el 2014, aviones egipcios y de los Emiratos Árabes Unidos han atacado con bombas y misiles las posiciones de las tropas libias, con el argumento de evitar la expansión del Estado Islámico que controla "parte del país africano".

Esto permitió que ese mismo año el ex gobierno pro occidental ganara terreno en algunas zonas del país. Pero los islámicos, agrupados bajo el nombre de AMANECER, continúan con el control de la mayor parte del territorio.

La vecina República de Yemen vivió un golpe de estado y ahora es gobernada por un régimen radical del corte islámico. Mientras que Arabia Saudita, al frente de una coalición regional y con apoyo de Estados Unidos, inició la guerra contra Yemen, cuyos soldados, en represalia, han hundido numerosos buques de la armada saudita.

Las aguas de esas regiones del Atlántico se han vuelto cada día más peligrosas para la navegación comercial, EXACTAMENTE COMO HABÍA SIDO ANTICIPADO POR EL NUEVO PERIODISMO CONTEMPORÁNEO UNIVERSAL O DE INTERNET.

También destaca el que las potencias militares predominantes denunciaron que el Estado Islámico controla extensos territorios en Libia y gran parte del continente africano, aunque con nombres distintos, con los que la prensa pretende dar la imagen de conflictos no relacionados entre sí.

En consecuencia, el 19 de febrero se han reiniciado los bombardeos de aviones extranjeros sobre el Libia, con saldo inicial de unos 50 muertos.

En el ataque perdieron la vida 2 diplomáticos serbios, prisioneros de las milicias del Estado Islámico.

De acuerdo a la verdad periodística y, después de observar el desarrollo de la guerra en lo que un tiempo fueron Siria e Iraq, en África y en Afganistán, no parece que estos nuevos bombardeos vayan a ser determinantes para arrebatar el control de los territorios libios a las milicias islámicas.

Pero sí podemos temer nuevos y continuados bombardeos, más intensos que aquellos que dejaron al país en ruinas y en guerra continua y generalizada, desde el 2011.

La verdad es la primera víctima en las guerras, por eso es necesario analizar las noticias con atención, porque la III Guerra Mundial se inició el 1 de enero de 1991 y no ha terminado, pero avanza con fuerza en todos los frentes y es indispensable el estar bien preparados.

AMIGOS, FORTALÉZCANSE:
AMANECERÁ Y VEREMOS.
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